
Este año especialmente el título de la mayoría de las películas favoritas que optan a Oscar se ha mantenido en inglés. Títulos como ‘The Brutalist’, ‘A complete Unknown’ o ‘Wicked’ se han dejado sin traducir.
Cabe preguntarse si todo obedece a una labor de marketing. Si no se ha traducido, por si se podía llegar a equívoco si no se conocía el argumento de la película. Cuando se tiene que traducir un título, no se busca una traducción, se busca un título que provoque un impacto como lo hace el título de la película original y que te persuada para ver esa película. En definitiva, una película es un producto de mercado y mientras mayor sea el público que la vea mejor.
Antiguamente las distribuidoras encargaban al país que buscara la traducción para el título de la película sin embargo en la actualidad son muchas las empresas de marketing que están implicadas. Resulta difícil buscar un título equivalente al título de una película porque ni el juego de palabras, ni los referentes culturales, ni el sentido son exactos.
Algunos autores critican la no traducción. Comentan que nuestro idioma no se enriquece. Otros autores abogan por la traducción literal del título.
Sin embargo, las traducciones literales de los títulos de libros en inglés funcionan bastante bien incluso por muy largo que sea el título. Se pone de manifiesto ahora que se leen tanto las novelas de Sarah J. Maas ‘A Court of Myst and Fury’ (Una Corte de Niebla y Furia) y ‘A Court of Thorns and Roses’ (Una Corte de Rosas y Espinas).
La subtitulación y el doblaje es otra cuestión relevante. La inserción de los subtítulos obedece a unas pautas. Hay unas normas establecidas para los subtítulos y aquí el traductor debe saber manejarse. A pesar de que se comente que lo que se acaba de escuchar es más largo que lo que se acaba de leer en el subtítulo. Otro asunto diferente sería la traducción equívoca de la información original o la falta de traducción de información importante en los subtítulos.
Sea como fuere el cine es magia y este mes de febrero lo estamos celebrando.